CUIDADO, LOCA, QUIEREN PROGRAMARTE
CUIDADO, LOCA, QUIEREN PROGRAMARTE Hay una nueva pandemia que azota la Ciudad Autónoma y que rápidamente se extiende a todos los rincones de esta república limonera. No es para nada silenciosa, es estridente y amiga de los algoritmos. Es como la fiebre amarilla, pero también es rosa. Pocos infectólogos la nombran, porque tienen miedo de que se les acuse de estar infectados de una soledad aplastante, pero prestá atención, amiga, porque es una pandemia que afecta principalmente a los trolos musculosos (aunque a veces también a twinks), a las tortas que le pagan a alguien para que les limpie la casa (pagan poco, pero no las juzgues, que las dejan usar la misma vajilla), a las travas que hablan inglés, a un puñado de varones trans con título universitario e incluso (CUIDADO) a las personas heterosexuales que se rodean de gentes cuir. Si te suena el teléfono, si tenés abierto un formulario para aplicar al Fondo Nacional de la Recalcada Pelotudez, CERRÁ TODO: podés contagiarte. Es que te qu